Sergio Ramos, capitán de la selección española y del Real Madrid, bromeó con las polémicas que suele protagonizar con el barcelonista Gerard Piqué, pero aseguró que todo se queda en la cuestión deportiva.
"No te voy a negar que nos gusta el morbo, nos hemos acostumbrado a tirarnos de vez en cuando alguna piedrecita pero lo tomamos sin ningún tipo de maldad, superdeportivo todo.
"Es parte del pique que hay entre Barcelona y Real Madrid. No va a cambiar, ni quita para que ahora nos daremos un abrazo", aseguró a su llegada a La Roja.
El capitán consideró al partido contra Israel como el importante de los dos próximos que disputa, por el carácter amistoso del encuentro frente Francia.
"Tenemos un partido muy bonito y estoy con ganas de seguir jugando bien al futbol con la selección. Ojalá pueda seguir esa racha goleadora en una ciudad como Gijón que me trae buenos recuerdos al ser donde cumplí cien partidos y tuve la oportunidad de marcar gol", recordó.
