La capital de la moda italiana, Milán, ha sido invadida por una ola de aficionados oriundos de Madrid, y del resto de España, que esperan ver a su equipo alzarse con la gloria europea y levantar la Orejona, tras 90 minutos, o más, de un intenso partido.
A las afueras de San Siro, en el centro comercial más famoso de la zona norte de Italia, la Galería Vittorio Emanuele II, en la catedral de la ciudad; los fanáticos al Atleti y al Real Madrid han hecho resonar sus cánticos, con el motivo de alentar a los suyos.
La tensión ocasionada por un paquete sospechoso en el metro de Milán fue olvidada y el ambiente crece conforme se acerca la hora del silbatazo inicial en la cancha, que rossoneri y nerazzurri defienden, pero que este sábado tendrá a dos protagonistas totalmente diferentes.
Hay fiesta en las calles de dicha ciudad italiana, y no es para menos, pues la gloria europea podría ser de cualquiera de los dos equipos que lucharán a muerte por alzarse con el trofeo de los máximos monarcas del Viejo Continente.