El Real Madrid se colocó, de nuevo, colíder en LaLiga después de un triunfo logrado de forma asequible contra un Girona que sucumbió ante la calidad de alguno de los cracks madridistas.
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Era un partido importante, antes del calendario complicado que se le viene a los de Ancelotti: semifinales de Copa ante la Real Sociedad en San Sebastián; Octavos de Final de Champions ante el Atlético; y unas últimas jornadas de liga en las que se lo jugará todo ante Barça (mismos puntos ahora) y Atlético (un punto menos).
El encuentro lo resolvieron dos chispazos de dos cracks como Luka Modric en el minuto 41, con una volea espectacular desde fuera del área; y Vinicius Jr con una gran asistencia de Kylian Mbappé que esta vez no pudo marcar.
Sin Bellingham
Sin el sancionado Bellingham y con algunas novedades como Brahim y Alaba en el once titular, el Real Madrid no dejó de sufrir algunas ocasiones claras del Girona, que fueron abortadas por un magnífico Courtois. Tras esas ocasiones en la primera parte, el Madrid ya pudo dominar e incluso “elegir” el momento para acelerar el partido.
Mbappé sigue con sequía
Quizás la única noticia negativa del encuentro fue la sequía goleadora de Mbappé, pese a que fue de los que más crearon en el juego y de los que más lo intentaron ante la portería de Gazzaniga.
Aquí en el Santiago Bernabéu, todo el mundo se fue contento tras un triunfo que deja al Madrid en lo más alto ante un próximo mes de locos en todas las competiciones.
