A donde sea que vaya Mario Balotelli, la polémica lo persigue. En esta ocasión, el delantero italiano fue corrido del entrenamiento que sostenía su actual equipo, Brescia. El estratega azzurri, Fabio Grosso fue el encargado de mandarlo a las regaderas antes de tiempo.
Según informa el diario italiano, Corrielle dello Sport, cuando la práctica se encontraba en pleno apogeo, el técnico le dio un par de gritos "¡Mario, vete! ¡Vete, Mario!", mandándolo directo a los vestidores antes de tiempo.
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Mario, fiel a su estilo, se fue emberrinchado y en cuanto terminó de ducharse, tomó sus pertenencias y se marchó en su automóvil particular cuando el entrenamiento seguía. Su presencia en el Olímpico de Roma este domingo es una incógnita.
Balotelli ya había estado en el ojo del huracán esta temporada al patear en balón hacia la grada en medio partido como protesta a los cánticos racistas de la afición del Hellas Verona hacia su persona; llegó a las lágrimas.
