Una filtración de correos electrónicos difundidos por el dominical británico 'Mail on Sunday' evidencia la supuesta infracción de las reglas del juego limpio financiero por los gestores del Manchester City en la temporada 2010-11.
De acuerdo con las revelaciones del tabloide británico, el City se habría beneficiado de un patrocinio en las camisetas de la aerolínea emiratí Etihad que no declaró, y que realizó de forma paralela a través de la Autoridad Ejecutiva de Negocios de Emiratos Árabes Unidos.
El viceprimer ministro de ese país, Sheikh Mansour, es el propietario del club, que ya ha sido en varias ocasiones en el pasado acusado de violar el 'fair play' financiero.
En concreto, el 'Mail on Sunday' publica un correo que supuestamente demuestra que el patrocinio declarado de Etihad ascendía esa temporada a cuatro millones de libras (4.7 millones de euros), pero que el club recibía en realidad otros ocho millones de libras (9.3 millones deeuros) adicionales por parte de sus dueños emiratíes.
Según el dominical, el City emitió una factura a Etihad de doce millones de libras (14 millones de euros), pero adjuntó una factura a mano en la que especificaba que la aerolínea solo debería pagar cuatro millones ese año.
Según se describe en su propia web, la Autoridad Ejecutiva de Negocios de Emiratos Árabes Unidos es "una agencia especializada del Gobierno con la misión de dar asesoramiento estratégico" a los máximos responsables del emirato de Abu Dabi.
De todo lo anterior, el 'Mail on Sunday' concluye que Etihad no pagaba en realidad las facturas emitidas por el club, sino que lo hacía de forma encubierta el Gobierno emiratí, lo que iría en contra de las reglas del juego limpio financiero.
Ya en febrero del año pasado, la UEFA castigó al City prohibiéndole participar en la Champions League por dos temporadas, pero el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS, por sus siglas en inglés) revocó en julio la sanción.
El TAS concluyó, después de escuchar las apelaciones del City, que el club inglés no camufló "fondos de capital" como "ingresos de patrocinadores", pero sí falló al cooperar con las autoridades de la UEFA.