Como en una montaña rusa, el rendimiento de la selección de Países Bajos ha registrado ascensos y desplomes pronunciados, tan es así que han pasado de disputar la final de un Mundial hasta no conseguir clasificar a este certamen.
En 1998 la ‘Naranja Mecánica’ avanzó con paso firme en competencias internacionales al llegar hasta las Semifinales de la Copa del Mundo con sede en Francia, torneo en el que cayeron a manos de Brasil, y dos años más tarde llegaron a la misma fase, esta vez en Eurocopa en donde su similar de Italia les impidió su avance.
Sin embargo, los Tulipanes tuvieron un trago amargo en el Mundial Cora del Sur y Japón, fiesta a la que no clasificaron, de nueva cuenta su trayecto se truncó en la Euro 2004 al no superar las semifinales al combinado de Portugal y dos años después le dijeron adiós al sueño mundialista apenas en Octavos de Final.
Pero la fortuna de la Naranja Mecánica cambió tiempo después. En 2008 llegaron hasta Cuartos de Final de la Eurocopa y la cereza del pastel llegó con el Mundial Sudáfrica 2010 cuando encararon la final ante España, misma que perdieron apenas por la mínima diferencia para adjudicarse el título de subcampeones.
Y de nueva cuenta llegó un descenso en la productividad del conjunto holandés. Quedaron en la fase de grupos de la Euro 2012, en Semifinales del Mundial Brasil 2014 y no logaron quedar entre los participantes de la Euro 2016 y el Mundial Rusia 2018.
Esta vez, la Naranja Mecánica registra un favorable paso: fueron finalistas de la Nations League. Frank de Boer y sus dirigidos buscarán mantener esta buena racha y respaldarse en el apoyo que tendrán de los 5 mil asistentes a su próximo juego ante Letonia.
“Sí, eso está bien. Me pregunto qué tipo de energía da eso. Y qué tipo de ruido hace. Pero el hecho de que haya gente allí es algo que sólo podemos aplaudir. Esperemos que sea el preludio de muchas más personas”, declaró en conferencia de prensa.