Así como lo hiciera su padre vistiendo los mismos colores, José Reyes, hijo de la Perla, honró la memoria de su padre de la mejor manera, marcando un Póker de goles en la Final de LaLiga Promises entre el Real Madrid y Sevilla (5-3), dándole el título a los merengues y siendo nombrado además como el MVP del certamen.
Y la hazaña no fue nombrada por todo el mundo del futbol por ser el ídolo del balompié ibérico, sino por la calidad de goles que marcó a pesar de su corta edad. En jugada a balón parado, de penal, tiro libre y haciendo una buena jugada individual, José se encargó de guiar al conjunto blanco rumbo al campeonato.
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Reyes terminó como máximo goleador del torneo (nueve anotaciones) y también fue nombrado mejor jugador del campeonato.
Previo al comienzo del enfrentamiento, el cuadro andaluz rindió un pequeño homenaje a José Antonio Reyes aprovechando la presencia de su pequeño. La Perla inició su trayectoria futbolística en Sevilla, para después pasar a equipos como Arsenal, Real Madrid, Atlético de Madrid, Benfica y Espanyol.
