En un futbol completamente globalizado, el Barcelona se niega a ganar una Champions League, siéndole infiel a su filosofía de La Masía por una en la que prefieren irrumpir mercados de transferencias, premisa que temporada tras temporada ha ido incrementándose durante la gestión de Josep Maria Bartomeu al frente del conjunto catalán.
Su mandato comenzó en 2014, cuando ganaron la orejona invirtiendo 166.72 millones de euros en siete refuerzos y con 14 canteranos que jugaron al menos un minuto en la temporada; del primer grupo sólo continúan en el plantel Suárez, Vermaelen, Rakitic y Ter Stegen, mientras que del segundo sólo lo hacen Messi, Busquets, Piqué, Sergi Roberto y Jordi Alba.
Al año siguiente, el Barcelona invirtió solamente 51 millones de euros en un par de refuerzos y ninguno de ellos sigue en el plantel, además, redujeron su número de canteranos a diez, destacando la partida de Xavi y Pedro.
En la temporada 2016, Bartomeu volvió a sacar la cartera, esta vez para adquirir a seis nuevos jugadores, los cuales sólo dos permanecen, mientras que en la cancha jugaban solamente ocho egresados de La Masía.
En 2017, con la partida de Neymar el club decidió irrumpir el mercado gastando más de 364 millones de Euros en siete refuerzos, entre ellos a Coutinho y Demebelé, quienes no han destacado en el equipo y que se presume pueden salir en verano, al igual que lo hicieron cuatro de aquellas siete adquisiones.
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Mientras en la actual campaña, el Barcelona gastó más 100 millones de euros en siete refuerzos, los cuales tanto Murillo y Malcom, ya suenan para marcharse del club en los próximos meses.
Actualemente, sólo seis canteraron han tenido minutos en lo que va del año, 55% menos que cuando los baulgranas ganaron la Champions por última ocasión .
La filosofía Bartomeu en Barcelona empieza a quedar en números rojas a nivel europeo pues sólo ha ganado una orejona por tres eliminaciones en Cuartos y una en Semifinales. De aquella cantera, empiezan a quedar sólo los recuerdos.
De hecho, el ex presidente culé, Joan Laporta, ha expresado a través de sus redes sociales la necesidad que tiene el club catalán de unas nuevas elecciones, cargo al que quiere volver.