Stamford Bridge era un auténtico hervidero. La Vuelta de las Semifinales de la Europa League estuvo llena de dramatismo y agonía para un Chelsea que a punto estuvo de ser eliminado frente al Eintracht Frankfurt, pero que resolvió todo en tanda de penaltis para firmar una 'Final Inglesa' frente al Arsenal.
Con Kepa Arrizabalaga convertido en héroe, los Blues derrotaron 4-3 a las Águilas en la serie desde los 11 pasos, luego de empatar 1-1 (2-2 global) en los 120 minutos que duró el partido en Londres.
La ventaja del gol de visitante que consiguió el cuadro de Maurizio Sarri en Alemania, sirvió de poco en casa a pesar de que tomaron la ventaja al minuto 28 del partido, cuando Eden Hazard realizó una gran jugada para habilitar a Ruben Loftus-Cheek, quien definió cruzado para vencer al guardameta rival.
Sin embargo, la tónica del encuentro cambió a partir de ese momento y el Frankfurt se volcó al frente para buscar la igualada, mientras que el Chelsea desaprovechaba algunas oportunidades al contragolpe para aumentar la ventaja en el marcador.
Así terminó la primera mitad y, ni bien empezada la segunda, el conjunto de la Bundesliga alcanzó el anhelado empate: al 49', Luka Jovic, de espaldas al arco, bajó con el pecho un balón para dejárselo a Gacinovic, quien devolvió de inmediato la pared mientras David Luiz perdía por completo la marca del serbio y éste aprovechava para irse solo frente a Kepa, a quien venció fácilmente con un disparo raso para el 1-1 en suelo inglés.
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Incomodados los ingleses por la solidez de los alemanes y amenenazados los germanos por la calidad arriba de los londinenses, la segunda mitad fue un intercambio de fuerzas que terminó en la prórroga.
Ahí, el Eintracht rozó el triunfo. Primero con un remate defectuoso de Haller que sacó David Luiz bajo palos con una estirada milagrosa y, más tarde, con un remate de cabeza que Zappacosta, a la desesperada, volvió a negar bajo la madera.
El italiano fue el único que lo probó para el Chelsea en la prórroga y se encontró con una gran parada de Trapp. En el córner posterior, el árbitro anuló un tanto a Azpilicueta por falta al portero de los alemanes.
Se agotaron los 120 minutos y los penaltis, verdugos del Chelsea en la final de la FA Cup, decidirían el acompañante del Arsenal en la Gran Final.
Jovic firmó el primero y Barkley igualó para el Chelsea, Haller recuperó la ventaja para el Frankfurt y cuando Azpilicueta quiso mantener la paridad, se encontró con una fantástica estirada de Trapp y la angustia embargó a todos los Blues.
De Guzmán acertó y Jorginho, con sangre fría, devolvió el aliento a su equipo. Aun así, el Chelsea necesitaba un fallo del rival y entonces apareció Kepa, quien aguantó bien el potente disparo de Hinteregger para clavar el balón en el suelo con la rodilla derecha.
David Luiz aprovechó la parada de su cancerbero para volver a empatar la tanda y Kepa, otra vez, respondió con una atajada a Gonçalo Paciencia. En el que podría ser su último servicio en Stamford Bridge, Hazard mantuvo la calma, mostró su clase y remató la tanda para mandar al Chelsea a Baku, donde el próximo 29 de mayo buscará el título continental.