El Chelsea aplastó sin muchos problemas por 3-0, con un doblete de Timo Werner y una diana de Tammy Abraham, a un Rennes que jugó más de medio partido en inferioridad por la expulsión del defensa Dalbert.
Los de Frank Lampard dejaron la puerta a cero (por sexta vez en siete partidos de Edouard Mendy) y golearon en un plácido encuentro que estaba ya definido al término de los primeros 45 minutos.
Antes de que el minutero marcara el 10', Henrique Dalbert, el desafortunado de la noche londinense, se llevó por delante a Werner en el área. El colegiado, Felix Zwayer, vio la pena máxima y el delantero alemán marcó desde el punto de penalti.
Hasta que Dalbert erró de nuevo. Una mano, de las que solo se pitan con el VAR, terminó con el partido. No la vio Zwayer, pero sí la tecnología, que mandó al alemán al monitor y a pitar el penalti, expulsando de camino al lateral por doble amarilla. Werner colocó la pelota en un ángulo, imposibilitando la parada del portero del Rennes en el penalti al 41'.
Una internada por una banda de Reece James, que puso un centro al primer palo para que lo empalmara Abraham supuso el 3-0 en el marcador y prácticamente el final del encuentro, aunque quedaran 40 minutos por delante.
Los 'Blues' aún no saben lo que es perder este año en 'Champions' y suman siete puntos en tres jornadas, lo que les sirve para liderar el Grupo E, igualados a puntos con el Sevilla y con seis de ventaja sobre Krasnodar y Rennes.