El derbi del norte de Londres, el famoso 'North London Derby' entre Arsenal y Tottenham Hotspur, cayó este sábado del lado de los 'Gunners', que se impusieron por 2-0 gracias a dos goles en la primera mitad y no exentos de polémica del chileno Alexis Sánchez y del alemán Shkodran Mustafi.
Una gran primera mitad le valió al Arsenal para dejar los tres puntos en el barrio de Highbury & Islington y colocarse temporalmente quinto en la tabla, con 22 puntos, los mismos que el Chelsea y uno menos que el Tottenham, que ve seriamente mermadas sus opciones de luchar por el título de liga.
Los de casa rondaron el gol muy temprano en el partido, primero con un lanzamiento desde dentro del área de Lacazette que se fue alto tras un error grosero de Dier en la salida y más tarde en una buena triangulación por el costado derecho entre Alexis y Bellerín, que puso el balón en boca de gol pero no llegó por poco el '9' galo.
Precisamente, cuando mejor estaban los visitantes, llegó, como un jarro de agua fría, el tanto de Mustafi que inauguró el marcador 36'. Pasada la media hora de juego, un robo limpio de Davinson a Alexis lo castigó inexplicablemente el árbitro Mike Dean como tiro libre, y el centro desde el lateral del alemán Özil lo cabeceó su compatriota Mustafi de forma magistral al palo largo de Lloris.
Apenas cinco minutos después, el Arsenal volvió a poner de relieve su excelsa pegada, y con su segundo disparo a puerta de la mañana -hubo dudas de si había fuera de juego- subió al luminoso el lapidario 2-0. Con el Tottenham ya pensando en el descanso, un gran balón entre líneas de Bellerín lo recogió Lacazette, quien vio a Alexis en el área de castigo y éste, con tiempo de sobra par controlar, fusiló en la salida a Lloris.
No se movió, sin embargo, el electrónico en el Emirates -Cech acudió al rescate de su equipo al sacar una gran mano a un testarazo de Dier en el área en los instantes finales-, y el Arsenal se llevó con justicia el derbi del norte de Londres (el primero en liga desde 2014), se metió de lleno en la lucha por la Liga de Campeones y se ganó, al menos durante unos meses, lo que en el Reino Unido llaman 'bragging rights', el derecho a presumir de victoria sobre tu acérrimo rival.