Interlagos es uno de los circuitos más impredecibles de la Fórmula 1 y Charles Leclerc lo comprobó antes de iniciar el Gran Premio de Brasil, pues se estampó con el muro de contención en la vuelta de formación.
"Perdí los hidráulicos. ¿Por qué tengo tan mala suerte, por qué carajos tengo tan mala suerte?", lanzó molesto el monegasco tras el incidente que lo sacó de la contienda.
Pero si Ferrari tuvo mala suerte, para Haas y Williams fue mucho peor. En los primeros metros de la carrera, Kevin Magnussen y Alexander Albon se tocaron, provocando el primer choque oficial y una bandera amarilla que posteriormente se volvió roja.
Del otro lado de la moneda, el mexicano Sergio 'Checo' Pérez salió ileso del complicado inicio de carrera, incluso subiendo dos posiciones, ya que largó como noveno y al momento de la bandera amarilla subió a séptimo.
Con esto, el tapatío de Red Bull apunta a ganar más posiciones en su pelea con Lewis Hamilton, piloto de Mercedes y principal rival por el Subcampeonato de la máxima categoría.