Esta vez Tony Hawk no voló. Voló su casco, coderas y tenis, que regaló a la afición mexicana que ayer asistió al Nixon Vertical Tour en la Arena Ciudad de México.
Tras varios intentos, 'The Birdman' no pudo asombrar a los mexicanos con el 720 grados (dos vueltas) ni con el 900 (dos vueltas y media) trucos que lo consagraron como la leyenda del skateboarding en los X-Games de 1998.
Hawk, de 48 años de edad que cumplió hace unos pocos días, mostró su frustración al no poder lucirse ante los más de 10 mil aficionados que en cada intento le aplaudieron y gritaron su nombre. Aunque se aferró en la rampa, cayó varias veces, en una ocasión la patineta salió volando, además de que mostró dolencia en la mano izquierda.
Tal fue su enojo que en el penúltimo intento azotó la patineta detrás de la rampa. El gurú del vert (medio tubo) mostró su agradecimiento al despojarse de sus pertenencias que aventó en diferentes direcciones del inmueble.
"Qué pasó México, gracias a la afición por venir y a todos los skaters", dijo Hawk quien se despidió con un "buenas noches México, en español. Los mexicanos respondieron el detalle cantándole las mañanitas a su esposa quien ayer cumplió años.
Evan Doherty, de 12 años de edad, quien sí hizo el 720 grados y seis ollies; así como Lizzie Armanto se llevaron los aplausos de la noche. Previo a la exhibición de skate, los Estrambóticos encendieron la Arena su éxito 'Peter Punk'.
Denalgas y Los Viejos fueron los encargados de abrir el Festival de Deportes Extremos. Mientras que Cartel de Santa cerró con broche de oro el espectáculo. ¿Habrá sido esta su despedida de los mexicanos? La pregunta está en el aire.
