Ronda Rousey quedó muy maltrecha tras perder por la vía del nocaut su cinturón peso gallo de la UFC contra Holly Holm, a tal grado que tardará aproximadamente seis meses en volver al octágono para intentar recuperar su cetro.
"Puede ser que sea de tres a seis meses antes de que pueda comer una manzana, por lo que recibir un impacto mucho menos", expresó 'Rowdy' en palabras recolectadas por la revista estadounidense 'ESPN Mgazine', donde añadió que se siente "jodidamente triste".
Rousey recibió una brutal patada en el rostro que le provocó lesiones en el labio y partes de la boca, por lo que tras el UFC 193 fue trasladada de inmediato al hospital para ser intervenida quirúrgicamente.
Posteriormente la empresa que dirige Dana White reveló que la exmonarca fue suspendida por medio año debido a las lesiones sufridas, en caso de que no se diagnostiquen conmociones, el tiempo de su regreso se podría reducir.