Japón se convirtió en el primer campeón mundial de Super Smash Bros. Ultimate durante la Electronic Entertainment Expo, donde se celebraron las Finales del Campeonato Mundial oficial de Nintendo.
Comandada por el astro japonés, Sota 'Zackray' Okada, la escuadra japonesa no tuvo problemas para aplastar a sus rivales en el escenario de la E3, dejando en las Semifinales al combinado de Estados Unidos para medirse a Europa en la Gran Final.
En un formato de tag battle 3vs3, los nipones se mostraron muy superiores para adaptarse a los diferentes match ups que se presetan con esta modalidad; sobre todo el propio Zackray demostró una gran versatilidad para usar y contrarrestar a diversos personajes.
Junto a Konbu y Kuro, Zackray logró la victoria por 3-1 para Japón en contra de los europeos, con lo cual se hicieron acreedores al título del certamen de Nintendo, con normas diferentes a las acostumbradas en la escena competitiva de este deporte electrónico, pero que igualmente levantó emociones entre los competidores.
