Luego cinco años de espera, el remake de Final Fantasy VII llegó para mostrar que los juegos de rol japoneses (jrpgs) no son cosa del pasado.
En casi 40 horas de juego, sin contar misiones secundarias, se podrá disfrutar de una reestructuración profunda del título original (1997) lleno de enemigos y jefes con los que no podrás acabar sólo ‘machacando botones’, pues para hacerlo debes conseguir armas que te den más vida, más daño mágico, defensa física o mágica, y aprender los patrones de los jefes.
Tras varias horas de probarlo, consideramos que las debilidades del juego son: algunos capítulos muy largos, misiones secundarias poco disfrutables, una cámara que a veces resulta caótica en las batallas y que quien sea nuevo en la franquicia tendrá que esforzarse bastante para entender qué pasa.
Pero también goza de puntos que lo hacen un excelente título, como: una banda sonora increíble, un sistema de combate que nunca aburre, gran variedad de enemigos y cinemáticas que sorprenden.
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Por eso, recomendamos la compra a quienes son amantes de los títulos lineales y del género; además, se espera que Square Enix emprenda una serie de remakes para que tanto los fans de antaño y los nuevos usuarios puedan adentrarse al mundo de FF.
