Los hermanos Stephen y Seth Curry jamás se imaginaron a la 'poderosa' defensa que enfrentarían durante un partido de exhibición en Corea del Sur.
Los estadounidenses tuvieron que medir sus habilidades contra un defensa que tenía varios pares de brazos y otro que rebasaba los cuatro metros de altura.
Tales obstáculos causaron la risa de los hermanos, que aprovechan el tiempo antes del inicio de la NBA, en octubre próximo.