El baterista Taylor Hawkins, de Foo Fighters, quien falleció la noche del viernes en Bogotá, donde la banda estadounidense se iba a presentar en el Festival Estéreo Picnic, fue atendido "por un dolor en el pecho" en la habitación del hotel en el que estaba alojado, informó este sábado la Alcaldía.
"El Centro Regulador de Urgencias y Emergencias de la ciudad recibió el reporte sobre un paciente con dolor en el pecho en un hotel ubicado al norte de la ciudad", detalló la Alcaldía en un comunicado.
La Alcaldía agregó que envió una ambulancia al hotel donde se alojaba la banda de Seattle pero a la llegada del personal de socorro encontraron que ya había un equipo de una empresa de salud en el lugar.
Sin embargo, "la profesional en salud que atendió la emergencia indicó que realizó las respectivas maniobras de reanimación; sin embargo, no hubo respuesta y el paciente se declaró fallecido", puntualizó el comunicado.
Las autoridades realizaron el levantamiento del cadáver y comenzaron las indagaciones requeridas para este tipo de casos.
Foo Fighters era una de las cabezas de cartel del Estéreo Picnic, donde su presentación estaba prevista para cerrar el primer día del festival, cuyos organizadores informaron el fallecimiento del baterista una hora antes de que subieran al escenario.
Hawkins, de 50 años, era una de las figuras más visibles de la banda junto al ex Nirvana Dave Grohl. En los conciertos solía dejar la batería para cantar clásicos del rock como Under Pressure, de Queen y David Bowie, o Rock n' roll, de Led Zeppelin.
Luego de conocerse el fallecimiento de la estrella de las baquetas, el público que asistió a la primera noche del Festival Estéreo Picnic rompió en llanto y lamentó la muerte del artista.
La tarima a la que se iba a subir la banda musical fue convertida en un altar en donde fueron prendidas velas en señal de duelo.
Este sábado seguidores del artista convocaron a una velatón en frente del hotel en el que falleció Hawkins, nacido el 17 de febrero de 1972 en Fort Worth, en el estado de Texas.