El secretario de prensa de la Casa Blanca en los primeros seis meses de gobierno del presidente Donald Trump, Sean Spicer, renunció a su cargo.
Una de las fuentes dijo que al parecer renunció debido a que no está de acuerdo con el nombramiento del nuevo director de comunicaciones de la Casa Blanca, Anthony Scaramucci.
Las conferencias diarias del exsecretario de prensa con los reporteros se habían convertido en algo casi obligado para ver por televisión hasta hace unas semanas, cuando adoptó un papel más discreto.
Spicer pasó varios años encabezando las comunicaciones en el Comité Nacional Republicano antes de ayudar a Trump en la elección general. Es cercano al secretario general de la Casa Blanca, Reince Priebus, y a varios colaboradores de bajo rango en el área de comunicaciones de la presidencia.
Se espera que Scaramucci tenga un papel visible como uno de los defensores de Trump en televisión, pero Spicer y otros funcionarios cuestionaron su contratación como director de comunicaciones antes de que el presidente busque reformar el sistema fiscal y otros temas políticos.