En México, el término ‘diablito’ eléctrico se usa para referirse a una conexión clandestina que altera el funcionamiento del medidor de luz con el objetivo de reducir el consumo registrado y pagar menos en la factura de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Este tipo de manipulación se realiza de distintas maneras, desde imanes que ralentizan el contador hasta conexiones externas que evitan que pase el registro del consumo real. Aunque para algunos puede parecer un ‘truco’ para ahorrar, en realidad es un delito federal, ya que implica el robo de electricidad, lo que genera pérdidas millonarias para el sistema eléctrico del país.
¿Por qué es ilegal?
Manipular el suministro eléctrico sin autorización es considerado fraude y está sancionado en el Código Penal Federal. Las consecuencias pueden ir desde multas elevadas hasta penas de prisión, dependiendo del monto del robo y la reincidencia. Además, la CFE cuenta con tecnologías avanzadas para detectar estas alteraciones, por lo que quienes recurren a esta práctica corren el riesgo de ser descubiertos y sancionados.
Otros fraudes eléctricos en el mundo
El robo de electricidad no es exclusivo de México. En otros países, existen prácticas similares con diferentes métodos y consecuencias legales:
España: Se han detectado fraudes mediante la manipulación de contadores digitales y el uso de ‘puentes’ para desviar la corriente. Las compañías eléctricas tienen sistemas de alerta para detectar irregularidades en el consumo.
Estados Unidos: Algunos consumidores intentan alterar sus medidores con software especializado o imanes, pero las empresas utilizan análisis de datos avanzados para identificar patrones sospechosos y aplicar sanciones.
Brasil: En zonas de bajos recursos, es común el ‘gato eléctrico’, una conexión ilegal directa a los postes de luz. El gobierno ha intensificado los operativos para desmantelar estas redes clandestinas.
India: El fraude eléctrico es un problema grave en ciertas regiones, donde se usan cables ilegales para conectarse a la red sin pagar. En algunos casos, las autoridades han implementado medidores prepagos para reducir esta práctica.
Aunque algunos ven el ‘diablito’ eléctrico como una forma de reducir gastos, las consecuencias pueden ser graves tanto para los usuarios como para el sistema eléctrico del país. Más allá de la legalidad, estos fraudes afectan la calidad del suministro y elevan los costos para quienes pagan correctamente su consumo.
Si te preocupa el monto de tu recibo de luz, existen formas legales y seguras de ahorrar energía, como el uso de electrodomésticos eficientes, bombillas LED y la desconexión de aparatos en desuso. ¡Evita riesgos y mantén un consumo responsable!
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