En un desenlace crucial para la industria del videojuego, Nintendo ha logrado una victoria significativa contra el emulador de Switch, Yuzu, sin necesidad de procedimientos judiciales. Los desarrolladores de Yuzu, Tropic Haze, acordaron pagar a Nintendo 2.4 millones de dólares en daños y perjuicios, marcando el fin de una de las herramientas de emulación más populares para la consola Nintendo Switch.
La demanda, presentada por Nintendo of America, alegaba pérdidas millonarias debido a las actividades de emulación llevadas a cabo por Yuzu, que permitía jugar títulos de Switch en PC. Tras un acuerdo de mutuo acuerdo, se ha determinado que Yuzu cese todas sus operaciones, incluida la distribución de su software y el uso de su dominio web, yuzu-emu.org, o cualquier variante relacionada.
Este acuerdo no solo implica la desaparición del emulador sino también prohíbe a Tropic Haze la distribución futura del emulador en cualquier forma que Nintendo pueda identificar, estableciendo un precedente contundente contra la piratería y la emulación sin autorización.
La resolución, emanada del Tribunal del Distrito de Rhode Island, subraya la posición de Nintendo contra la distribución de ROMs sin consentimiento y la emulación que facilita el acceso a juegos mediante claves criptográficas no autorizadas.
La batalla legal culmina después de que Yuzu respondiera inicialmente a la demanda de Nintendo, indicando que contaban con representación legal y estaban preparados para enfrentar el caso. Sin embargo, el acuerdo alcanzado evita la necesidad de un proceso judicial, cerrando efectivamente el capítulo de Yuzu y reafirmando la postura de Nintendo contra la piratería y la emulación ilegal.
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