La Parka
Uno de los ídolos de la lucha libre mexicana está con RÉCORD y te traerá el acontecer y la opinión que necesitas de un experto.
¡Mi papá siempre fue un alma libre!
¡Wow! Nunca me imaginé tener la oportunidad de escribir esta columna, mucho menos a nombre de mi padre y en estas circunstancias. Queridos lectores, me presento con ustedes, soy el hijo de La Parka, Karis La Momia Jr.
Mi papá siempre se sintió muy orgulloso de escribir en este espacio para ustedes, de ser un columnista deportivo de un periódico tan importante, en el que pudiera descubrirles la magia que envuelve a cada función de lucha libre y convencerlos, a través de sus palabras, de visitar cada una de las arenas que fueron testigos de su exitosa carrera.
Por eso acepté la invitación de RÉCORD para poner punto final a la aventura que vivió mi padre, formando parte de sus páginas durante casi tres años, y compartirles que se fue en paz, recordando a cada uno de ustedes.
La Parka fue un alma libre, un hippie, y en medio del dolor que siento, me tranquiliza pensar que se encuentra en un lugar muy especial disfrutando plenamente de la libertad que defendió durante los 54 años de su vida.
Sin duda estoy atravesando los peores días de mi existencia. Perdí a la persona que más amé, que más admiré y debo confesarles que me siento solo y desprotegido, pero sé que tengo que salir adelante.
Me hubiera gustado que me viera hacer muchas cosas dentro de la lucha libre, ojalá que desde ese lugar en donde está ahora, lo haga y sepa que daré mi mejor esfuerzo por él, por mi familia y por mí.
Les agradezco todo el cariño que le dieron siempre a mi papá, sobre todo en los últimos meses, ustedes fueron su mejor medicina y se los llevó dentro del corazón.
Gracias a RÉCORD, a Carlos Ponce de León, su director, a todos los que participaron para que cada sábado mi padre mostrara orgulloso su trabajo como columnista. Llegó el momento de poner el punto final, para que inicie una nueva etapa, en la pluma de Psycho Clown. Gracias, muchas gracias por amar a La Parka.
Es por ello que les extiendo la invitación para honrarlo como se merece, con una misa que se celebrará el próximo 29 de enero, en punto de las 15:00 horas, en la Basílica de Guadalupe.
Y como él diría: soy sereno, pero con la lucha libre me desenfreno. ¡Hasta siempre, papá!