La hipocresía en Chivas

Tantos años y la madurez no existe en el Guadalajara. Jorge Vergara es especialista en tomar decisiones con el estómago sin pensar en las consecuencias. Por eso están al borde del descenso; por eso este equipo es el hazmerreír y por eso su historia es pisoteada de manera continua.

Justificado es el hecho de despedir a José Manuel de la Torre por sus pobres resultados en este torneo pero, ¿de qué sirve? La hipocresía con la que se maneja la dirigencia rojiblanca es evidente, por un lado se niegan a la contratación de jugadores naturalizados y por el otro siguen confiando el equipo en entrenadores extranjeros que, ¡qué maldito conocimiento del medio tienen! Ya les pasó con el tándem Cruyff, Van’t Schip, y ahora Matías Almeyda es el elegido para tomar las riendas.

Cuando existía un proyecto que lucía sólido con los hermanos De la Torre, la grilla interna los acabó como fue con otros entrenadores, presidentes deportivos, jugadores, vaya hasta con la podóloga. Todos meten la mano en el equipo, todos opinan y Vergara es un buen comprador como lo es como vendedor. Como sucedió en años anteriores, Vergara pone el destino de sus Chivas en manos de un ilustre desconocido, un gitano, que tiene mucho más que ganar que perder. Almeyda será muy popular por sus ascensos con River Plate y Banfield, pero en Primera División fracasó rotundamente al ser despedido al dirigir solamente cuatro partidos. Es un proyecto de entrenador, no una solución para un equipo como Chivas.

Los caprichos de Vergara han costado mucho dinero, nada más del despido anticipado de Cruyff y Chepo se rondan los ocho millones de dólares, por eso no tienen dinero para buenos futbolistas.

¿Quién puede sacar de la mediocridad a Chivas? Quienes suman el paupérrimo porcentaje actual de 1.0789 son: Juan Carlos Ortega que dirigió 12 partidos ganando 8 de 36 puntos disputados; Benjamín Galindo, lo hizo en cinco partidos consiguiendo 4 de 15 puntos; José Luis Real, 13 partidos donde ganó 17 de 39 puntos; Ricardo La Volpe estuvo en 4 partidos, ganó 4 de 12 puntos; Carlos Bustos en 11 partidos consiguió 10 de 33 puntos; el interinato de Ramón Morales fue de 1 partido en donde no ganó nada y José Manuel de la Torre donde en 30 partidos consiguió 39 de 90 puntos disputados.

Vergara se cansó de Chepo como se ha cansado de todos los demás y seguramente pronto se cansará de Almeyda. No hay certeza, no hay proyecto, no hay nada en el Guadalajara. Si se mantienen en la Primera División será más por lo que dejen de hacer los demás equipos involucrados que por su planeación y estrategia.
La salida de Néstor de la Torre de la presidencia deportiva de Chivas es lógica, después de lo que vivió el fin de semana donde no fue tomado en cuenta para las negociaciones con el estratega argentino Matías Almeyda.

Sin embargo, Néstor es tan responsable como Chepo: dejar libres a tantos futbolistas que se enrolaron con rivales directos en la lucha por la permanencia fue un craso error, evidente cuando no trajeron a nadie a reemplazarlos. Es un equipo mal planificado y en los números se reflejan. Sentirse los salvadores de Chivas antes de tiempo fue un error evidente de los hermanos De la Torre.