Que tristeza que un árbitro pierda la credibilidad, como ocurrió en el Chivas vs Necaxa.
El penal que sanciona Isaac Rojas a favor de Necaxa es inexistente, fue muy pobre su criterio, por eso tardó 4 minutos para reanudar por la protestas de los jugadores de Chivas. Además, Sánchez le gritó en la cara y no hizo nada.
En el segundo tiempo hay un penal de González sobre Zaldívar, en el min. 59, que no sancionó. Entiendo que no hay muchos árbitros confiables en este momento pero repetir a Isaac es un atentado contra el arbitraje y la Liga MX.
Confirmando la mediocridad de su arbitraje, Rojas revisa un penal clarísimo, qué malo es.
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