Lo ofertado por las bellas damas el pasado fin de semana -ritmo torbellinesco- fue extraordinario; el aforo fue saturado, produciendo alegría entre la asistencia en Ecatepec, Estado de México. Los aplausos fueron repartidos para ambas.
DFP tag: DN_Intext_Center_BTF_1
Nacho Beristáin ratificó su oficio
De siempre, los mentores de nuestro país tienen una importante responsabilidad: ellos diseñan la estrategia. Para este cotejo, la favorita era Arely Muciño bien dirigida por su progenitor; el cotarro de los fanáticos a la monumental carpa de Ecatepec era a favor de la maestra en educación física, egresada de la Universidad Autónoma de Nuevo León.
Los primeros capítulos fueron sin esa entrega a la cual nos tiene acostumbrada Arely; la ‘Kika’ de enfrente tenía una energía extraordinaria. Sin exageración entre alegría y confianza, se fue ganando a la parroquia.
En este tipo de estrategias ofensivas, la mayoría exclama que el oxígeno no le va a durar, en lo personal, ‘Kika’ dio una cátedra de vigor, confianza y concentración, dándose un detalle que cuando el episodio finalizaba, volteaba para ver a sus padres y les enviaba besos.
Las revanchas engañan
El interés del pleito era un marcado veredicto a favor de la campeona mundial Arely Muciño, paisana de el excampeón mundial de los plumas, el tremendo aplicador de TNT, Clemente Sánchez, en paz descanse. Poco a poco la grey conocedora de la fiesta de los puños dudaba que la ‘Kika’ aguantaría el ‘vaivén’; en lo personal hice un comentario “dudo que le dure el oxígeno”, así que la determinación de Chávez me hizo quedar mal.
Entre el monstruo de mil cabezas, en su termómetro se marcaba un brutal ascenso, como siempre su manejador, Nacho Beristáin, con su habitual paciencia, le reiteraba que estaba en el camino correcto.
Los fanáticos cercanos a donde yo estaba, junto a mi compañero en la transmisión, Leo Riaño, empezaron mostrando cierto escepticismo y conforme el dios Cronos transitaba con alegría la riña, por ahí del quinto episodio, sólo tenía una dama y señora de la situación. Sus fanáticos le gritaban: ¡Súper ‘Kika’!.
Sus fanáticos, de primera clase
Eran sus padres, a su progenitor lo conocí hace 25 años cuando fue bautizado como el ‘Kiko’. Era un intenso pupilo de Nacho mBeristáin, este con su pausa y concentración le reiteraba que no disminuyera la ofensiva. Su familia también mostró que su credo era siempre al frente, se distinguían con unas playeras perfectamente confeccionadas a colores de medio cuerpo.
Este tipo de combates es muy difícil que se vean con frecuencia la motivación de padres, hermanos y amigos, que se acercaban a la orilla del cuadrilátero; la respuesta de ‘Kika’ era con una sonrisa en el momento del monólogo de Nacho Beristáin. Siempre la ‘Kika’ lo veía de frente.
La reflexión
En el desarrollo de el boxeo femenil, desde la primera gran estrella como la inolvidable Laurita Serrano, este poco a poco ha superado a pugilistas los cuales están fuera de la galaxia de la atención boxistica.
La improvisación de la macro carpa -en donde presenciamos el ocaso de una combatiente de primer nivel, como la egresada mde la bien recordada Universidad Autónoma de Nuevo León, conocida como ‘La casa de los auténticos Tigres’, que inmortalizara el apasionado, primero jugador y después entrenador, el Ingeniero Cayetano Garza- en la pasada funcion me quedó grabada la mconducta del manejador de la licenciada Arely Muciño.
Me refiero a su progenitor, en el ocaso de la batalla, siempre orientando a su hija con tranquilidad, sin pretender improvisar en el descenso hacia la derrota. Esta imagen ojalá sea difundida para los manejadores de nuestra república, como ejemplar.
