A los 36 años, la mayoría de los basquetbolistas se encuentran alejados de las duelas, quizás podando el pasto de la lujosa casa que pudieron adquirir con los elevados sueldos de la NBA o como comentaristas de algún canal de televisión. Pero ese no es el caso de Chris Paul, quien pese a ver más cercano el retiro que el Draft de 2005 cuando fue seleccionado, posee un espíritu inquebrantable que le hace soñar con su primer título a pesar de su veteranía.
El base llegó a Phoenix en la temporada baja en un movimiento que parecía ideal para ambas partes, al ser un equipo colmado de jóvenes a los que sin duda un experimentado como el oriundo de Winston-Salem vaya que podría beneficiar. Y vaya que el arribo de CP3 revivió a la franquicia de los Suns, misma que no había asistido a Playoffs desde el ya lejano 2010, y de la mano de Paul está a solo tres victorias más ante los Nuggets de volver a la Final de Conferencia en el Oeste y, ¿por qué no? Aspirar a colocar el Larry O’Brien por primera vez en sus desangeladas vitrinas.
En el primer juego de las Semifinales ante Denver, Paul se unió a Steve Nash y John Stockton como los únicos jugadores de 36 años o más con 20 puntos y 10 asistencias en postemporada en los últimos 30 años, para mantener el sueño de los Suns intacto, toda vez que además de la heroica de CP3 se convirtieron en el primer equipo de la NBA en tener tres jugadores con 20 puntos y 65% de tiros en un juego de Playoffs desde los propios Suns pero el 9 de mayo de 1995 contra los Rockets.
Y es que el lunes por la noche, Devin Booker, Mikal Bridges y Deandre Ayton terminaron con más de 20 unidades cada uno con 65% de campo, para no desentonar con la sinfonía orquestada por el maestro Paul, quien es uno de los escasos 13 jugadores nacidos en 1985 que aún se mantienen vigentes en la liga del total de 78 que formaron parte de algún equipo de la NBA.
En un momento, los Suns estuvieron detrás del campeón defensor Lakers por 1-2 en la serie anterior, y Chris Paul era una silueta de sí mismo debido a una lesión en el hombro. Sin embargo, el base se redimió y los del desierto ganaron los siguientes tres juegos al conjunto de Los Ángeles, que se convirtió tan solo en el undécimo campeón en quedar eliminado en primera ronda de Playoffs al año siguiente de su coronación.
