Las investigaciones en contra del expresidente del Barcelona, Josep Maria Bartomeu, han dado un nuevo giro luego de que tres trabajadores de I3Ventures, empresa que desprestigiaba a los adversarios de Bartomeu, ocultaran pruebas al vaciar y formatear varios equipos de cómputo.
Además, dos declarantes en el caso asegurarón que un ingeniero informático viajó a España desde Sudamérica para comprobar que no saliera información de la empresa ya que habían recibido un ataque informático.
Sin embargo, los trabajadores de I3Ventures señalaron que estas medidas se dieron después de que el caso del 'Bartogate' fuera publicado por la prensa, además de que se les obligó a firmar documentos de confidecialidad sobre el trabajo que realizaban.
Los empleados de también han referido que Jaume Masferrer, otro de los imputados en el caso, visitó en varias ocasiones las oficinas de I3Ventures para realizar constantes estudios de imagen a Bartomeu, incluso más seguido que los realizados por el club blaugrana, y que también se realizaron informes sobre los candidatos para relevar al directivo de la presidencia Víctor Font, Joan Laporta y Toni Freixa.
Los declarantes señalan que los informes sobre las actividades que realizaba el expresidente fueron modificados antes de ser entregados a PWC, empresa encargada de realizar la auditoria.
El juez que lleva el Bartogate ha decidido dar una prórroga de seis meses en vista de que siguen apareciendo nuevas informaciones y declaraciones.