La pandemia no solo ha afectado a la organización de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, sino a los mismos deportistas que asistirán al magno evento, tal es el caso de Katie Ledecky y Simone Manuel.
Las nadadoras estadounidenses no podían llevar a cabo sus entrenamientos ya que las instalaciones de la Universidad de Stanford cerraron por el Covid-19, y justamente en esa universidad está la alberca en donde ellas entrenaban.
Ledecky y Manuel tuvieron que encontrar una solución alternativa, y es que cuando cerraron la universidad en marzo de 2020 no sabían que los Juegos Olímpicos se iban a posponer.
La solución fue la piscina que se encontraba en el patio trasero de la casa de Tod Spieker, quien es una leyenda de la natación de los Estados Unidos. Al final los Juegos Olímpicos se pospusieron y Ledecky y Manuel volvieron a las instalaciones de Stanford en junio.
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Ahora se espera que Ledecky, quien es la mejor nadadora de distancia de Estados Unidos y Manuel, la nadadora más rápida del mundo, se combinen para ganar 10 medallas olímpicas en Tokio 2020.