En una conferencia de prensa llevada a cabo el martes 8 de agosto, la selección nacional de natación artística reveló detalles sobre cómo Ana Guevara, directora de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte (Conade), negó el acceso al Centro Nacional de Desarrollo de Talentos y Alto Rendimiento (CNAR) a la coreógrafa ucraniana Olga Pylypchuk.
Pylypchuk, quien llegó a México para colaborar con el equipo en su preparación para los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, fue detenida en el estacionamiento del CNAR. Adriana Loftus, entrenadora de la selección nacional de natación artística, explicó que el personal de seguridad le permitió ingresar, pero no a Pylypchuk. La orden, según se le informó, provenía de la dirección de la Conade.
Loftus solicitó el apoyo del Comité Olímpico Mexicano (COM), que habló con el subdirector de Calidad para el Deporte de la Conade, Israel Benítez. Aunque Benítez explicó que se trataba de una instalación federal y que necesitaban saber quiénes estaban ingresando, Loftus enfatizó que Pylypchuk no había venido como ilegal y que se había enviado su currículum.
La situación se complicó aún más cuando Loftus tuvo que explicar a Pylypchuk, quien no habla español, la razón de la negativa. Loftus optó por mentirle, diciéndole que las calderas se habían inundado y que irían a otra instalación.
"Es una vergüenza, que venga ella del otro lado del mundo para que no la dejen acceder. No le quise decir lo que estaba pasando", declaró Loftus.
La entrenadora concluyó con una crítica contundente a la Conade, cuestionando la motivación detrás de la decisión, especialmente porque la instancia no pagó los vuelos, hospedaje, alimentación y honorarios de la ucraniana. Todo fue costeado por Grupo SPIN, una empresa orientada al tratamiento de agua en sectores industriales y comerciales.
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