La historia de los Super Bowls puede tener un capítulo muy especial en su edición LII, ya que existe la posibilidad de que el equipo que funge como local en el estadio donde se llevará a cabo juegue el partido y eso es precisamente lo que están buscando los Vikings, ya que sólo le necesitan vencer a los Eagles en el Lincoln Financial Field para lograrlo.
De por sí, la manera en la que el equipo de Minnesota consiguió su pase a la Final de Conferencia ya fue muy especial, luego de que vencieron a los Saints en la última jugada del partido en Ronda Divisional, precisamente en el U.S. Bank Stadium, por lo que la historia ‘de película’ podría ampliarse para ellos, aprovechando también la gran inercia positiva que representa el haber obtenido así su primera victoria en Playoffs desde la temporada 2009.
Para la franquicia de Filadelfia también habrá una motivación extra, ya que nuevamente saldrán al emparrillado como el equipo no favorito en los casinos de Las Vegas, a pesar de que jugarán en casa, algo que muchos jugadores aseguraron les molestó, pero a la vez les ‘picó en el orgullo’, ya que toda la campaña los han visto hacia abajo y, al final, se quedaron con el primer sembrado de la Conferencia Nacional.
Ninguno de los dos equipos que buscan representar a la NFC en el Super Bowl LII han ganado un trofeo Vince Lombardi, por lo que el hambre de triunfo será un ingrediente extra para este enfrentamiento, buscando darle a su afición una alegría que nunca han podido experimentar.
La última vez que Eagles y Vikings chocaron fue en la Semana 7 de la temporada 2016 y el equipo de Filadelfia se quedó con el triunfo de 21-10, en el Lincoln Financial Field, precisamente en donde jugarán este domingo y donde los de Minnesota sólo han podido salir con el triunfo en una ocasión desde 1981, con once compromisos en dicho recinto desde dicha fecha.
