La temporada anterior, los Gigantes de Nueva York terminaron con un ayuno de cuatro campañas consecutivas sin Playoffs, así que el requisito mínimo para este año es llegar nuevamente a Postemporada.
Eli Manning, pasador de la franquicia, ha ido a la baja, pues tanto su número de yardas por pase así como los touchdowns han disminuido con respecto a sus dos temporadas anteriores.
Teniendo en cuenta esto, la línea ofensiva deberá hacer un trabajo excelente para darle tiempo a Manning de ejecutar sus jugadas.
La confianza de los Gigantes está puesta en su defensiva, ya que la campaña anterior terminó como el décimo mejor muro de la NFL y fue la tercera mejor barrera contra la carrera.
Así que el equipo espera que su defensiva responda por lo menos al igual que la temporada pasada para tener aspiraciones en el año.