Los Falcons de Atlanta se 'sacaron la espinita' de su última derrota en juego de eliminación y empezaron la Postemporada con una contundente victoria de 26-13 sobre los Rams de Los Angeles, en un partido en el que lucían como las víctimas, pero sacaron a relucir sus fortalezas.
El último encuentro que habían encarado de eliminación directa fue el Super Bowl LI, mismo en el que cayeron de una manera muy dolorosa, teniendo una ventaja de 28-3 en la segunda mitad y no pudiendo mantenerla contra los Patriots de Nueva Inglaterra, por lo que ahora cobraron venganza en el Angeles Memorial Coliseum, para seguir con su camino y ahora tener que enfrentar al primer sembrado de la Conferencia Nacional, los Eagles de Filadelfia, en Ronda Divisional.
Los Falcons tomaron las riendas desde el inicio del partido, ya que nunca en ningún momento se vieron abajo en el marcador y, con tres minutos en el segundo cuarto, tenían ventaja de 13-0, misma que se acortó para irse al descanso 13-10, en lo que todavía era un partido que podía ser para cualquiera.
El pateador del equipo de Atlanta, Matt Bryant, se encargó de ampliar la ventaja en favor de los visitantes con dos goles de campo en el tercer cuarto, para finalizar el encuentro con un total de cuatro.
Ya para el último cuarto, el pateador novato de los Rams, Sam Ficken, acercó a su equipo con tres puntos, pero Julio Jones dio la estocada final con una recepción de touchdown de ocho yardas, para dejar el partido con dos posesiones de diferencia, algo a lo que los californianos no pudieron sobreponerse.
Ahora sólo falta definir el rival que tendrán los Vikings de Minnesota en la Ronda Divisional, mismo que será el equipo que resulte el ganador en el juego entre los Panthers de Carolina y los Saints de Nueva Orleans.
