Antonio Brown, jugador de la NFL que permanece como agente libre, quedó en libertad condicional tras enfrentar cargos relacionados con una riña a comienzos de este año.
Como parte de un acuerdo al que llegó con los fiscales del condado de Broward, Brown no se declaró culpable ni inocente de los cargos de agresión, invasión de una propiedad deshabitada y conducta delictiva, relacionados con la pelea en la que se habría enfrascado con el conductor de un camión de mudanzas frente a una casa en el sur de la Florida.
Al presentar esa declaración, Brown quedará en libertad condicional por dos años, tendrá que someterse a una evaluación psicológica, debe continuar con un tratamiento, asistir a un curso de manejo de la ira, cumplir con 100 horas de servicio comunitario y acatar una orden para alejarse del conductor y del dueño de la compañía de mudanzas.
Carson Hancock, abogado de Brown, dijo en un comunicado que el caso se derivó de un malentendido entre el deportista y la empresa de mudanzas sobre los pagos que debían realizarse. Por ende, había pedido que el caso se manejara como una disputa civil.
“Más que involucrarse en un prolongado caso legal, el señor Brown decidió resolver este asunto de una manera expedita, teniendo en consideración a su familia y su carrera en el fútbol” americano, indicó Hancock.
El 21 de enero, la policía respondió a una llamada sobre una alteración del orden en la casa de Brown, ubicada en Hollywood, Florida. Ahí, el conductor del camión de mudanzas dijo que Brown y su entrenador lo habían golpeado.
Brown se había negado a pagarle 4 mil dólares al conductor para que concluyera el traslado de sus bienes a la casa, de acuerdo con la policía. El chofer dijo a los agentes que Brown le lanzó una piedra mientras el camión se alejaba, causando una ligera abolladura en el vehículo.
Más tarde, cuando el conductor volvió, Brown pagó los 4 mil dólares, pero se negó a cubrir 860 más por los daños al camión, indicó la policía. El chofer volvió al vehículo para llamar a su compañía.
Entonces, Brown lo habría sacado a la fuerza, mientras comenzaba a retirar cajas del camión, ayudado por el entrenador y otras personas.
El conductor les advirtió que las cajas pertenecían a otro cliente.Brown se había marchado del lugar cuando llegó al policía. El entrenador fue detenido y el deportista se entregó dos días después.
