Por primera vez desde su llegada a la NFL en el 2004, el futuro de Ben Roethlisberger como quarterback de los Steelers parece no estar asegurado.
Los 38 años de edad del jugador y las constantes lesiones que ha sufrido en las últimas temporadas ha puesto a pensar en su futuro a una de las organizaciones más ganadoras en la historia de la liga, aunado al tope salarial de cara a la campaña 2021.
Pittsburgh es uno de los equipos que más se pasa en el tope salarial, que será de 180 millones de dólares, y la clave para armar un equipo competitivo pasa por la reestructuración en el contrato del dos veces campeón del Super Bowl.
El presidente del equipo, Art Rooney II, aseguró que se reunió con Ben y “discutimos cosas que se relacionan con dónde estamos y hacia dónde queremos ir. Me aseguró que está comprometido a regresar para ayudarnos a ganar, y le dije que nos gustaría tenerlo de regreso para ayudarnos a ganar un campeonato. Ambos entendemos que el siguiente paso es resolver la situación del contrato de Ben".
De acuerdo a reportes de medios estadounidenses, los Steelers pretenden darle un contrato mínimo para veteranos y de esa forma liberar los 34 mdd que le tendría que otorgar en el próximo año, luego de firmar una renovación previo a la campaña anterior de dos años y 68 millones de dólares.
Ambas partes han mostrado su disposición por llegar un acuerdo que beneficie a la franquicia de la AFC Norte y que puedan soñar con el tercer título desde que se unieron en el 2004.
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Pittsburgh viene de caer eliminado en la ronda de comodines ante los Cleveland Browns, luego de haber tenido el tercer mejor registro de la Conferencia Americana con marca de 12-4.
Roethlisberger tuvo acción en 16 partidos, donde registró 4 mil 304 yardas aéreas, 37 touchdowns y 14 intercepciones.
