La muerte regresa al automovilismo, ahora en Le Mans

Ayrton Senna murió en 1994, cuando corría el GP de San Marino | ESPECIAL
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| 24 Jun, 2013

REDACCIÓN RÉCORD

Este fin de semana, el automovilismo y el mundo deportivo se vistió de luto por la muerte del piloto danés Allan Simonsen en las 24 Horas de Le Mans.

Los accidentes en el deporte motor pueden aparecer en cualquier momento, y aunque las medidas de seguridad, tanto en los circuitos como en los autos son cada vez más estrictas, algunos pilotos no han podido eludir a la muerte.

Simonsen mantenía un ritmo adecuado para el principio de la competencia, pero se despistó en la curva ';Tertre Rouge';, apenas en el cuarto giro que daba al circuito de Le Mans, y se estrelló contra el muro de protección.

El volante del auto número 95, Aston Martin Vantage GTE, es la primera víctima mortal de las 24 Horas de Le Mans desde 1997.

La anterior víctima mortal de la mítica competencia fue el francés Sébastisen Enjolras, quien perdió la vida el 3 de mayo al frente de un WR LM97-Peugeot.

Durante los entrenamientos de clasificación previos, el coche de Enjolras despegó de la pista hasta impactar contra las barreras de seguridad y quedar envuelto en llamas.

Pero desgraciadamente muchos pilotos, en distintas categorías, encontraron un trágico final, mientras intentaban alcanzar la gloria a toda velocidad.

La Fórmula Uno ha cobrado muchas víctimas a través de su historia, pero una de las más recordadas en la actualidad es la del ídolo brasileño Ayrton Senna, quien en el Gran Premio de San Marino de 1994 impactó su Williams al salir de una curva y perdió la vida.

Ese fin de semana, el Autodromo Internazionale Enzo e Dino Ferrari se cubrió de tragedia, pues los accidentes fueron el principal protagonista y, además de la muerte de Senna, también cobró la vida del piloto Ronald Ratzenberger.

Aunque son muchos los accidentes y los pilotos que han terminado su historia con un accidente en la pista alrededor del mundo, la muerte de Ricardo y Pedro Rodríguez sigue siendo recordada en la actualidad, pues dos excelentes pilotos mexicanos a nivel mundial vieron truncadas sus carreras de un golpe.

La última gran tragedia en el deporte motor de nuestro País fue en la NASCAR México, cuando Carlos Pardo se impactó en la última vuelta de la carrera que se realizaba en el Autódromo Miguel E. Abed. El piloto ganó esa competencia, al ir en la punta cuando sucedió el percance.