Lo difícil no es llegar, sino mantenerse. Esta frase se traduce a lo que está viviendo Shayne Skov con los 49ers de San Francisco, donde busca consolidar su carrera como jugador en la NFL.
El originario de California, pero criado en Guadalajara, está cumpliendo lo que se forjó desde sus primeros días, cuando se colocaba el uniforme y el casco del Club Carneros: jugar a nivel profesional y vivir de un deporte que, con el paso del tiempo, lo ha moldeado como persona y deportista.
Luego de un año (2014) en el que fue integrante del equipo de prácticas de los mismos gambusinos y de Tampa Bay, Skov logró ganarse un lugar en el roster de 53 jugadores de San Francisco para esta campaña.
“Cada semana y cada partido es un reto, aquí no tienes tiempo de bajar los brazos o sentirte confiado porque ya estás en un equipo; aquí ya todos son profesionales y te exigen de la misma manera, pero eso es lo que me encanta de este deporte, lo juego precisamente por esa razón”, explica el linebacker a RÉCORD vía telefónica desde San Francisco.
Sin embargo, la satisfacción no es completa, y no porque sienta que no da su máximo esfuerzo, sino debido a que a los Niners, con muchos fans en México, no les ha ido bien en las últimas semanas, con un par de derrotas aceptando más de 40 puntos.
“Estoy feliz por un lado porque he jugado bien en los equipos especiales; por otro lado, tenemos que seguir mejorando, no hemos jugado bajo las mejores circunstancias, no somos los únicos que tienen que corregir errores”, añadió.
La historia de Shayne apenas comienza y así como se convirtió en pieza fundamental de la defensiva en Stanford, tiene confianza de poder hacerlo con San Francisco.