Grata sorpresa se llevó Tom Brady, así como su madre Galynn, quien recibió un anillo de Campeón del Super Bowl LI después de que no pudiera estar presente en la gran remontada de los Patriots, tras haber estado sometida a un tratamiento contra el cáncer.
Fue de la mano del propio Robert Kraft, dueño del cuadro de Nueva Inglaterra, que la progenitora de Brady se hizo con la joya de monarca de la NFL, mismo que representó y que convirtió a su hijo en el QB más ganador de la historia del deporte de las tacleadas.
"Él (Robert Kraft) ha sido un apoyo muy grande para mi familia y sobre todo con todo por lo que pasó mi madre y lo difícil que fue lidiar con esto. Siempre preguntó '¿cómo está tu madre, cómo se siente?'. Fue hasta el final que supimos que sí iba a lograr llegar al Super Bowl (LI)"
"Siempre fue una gran inspiración para mí y Robert Kraft siempre lo supo. Fue una gran sorpresa para todos nosotros cuando vimos el anillo. Ella se lo merece", declaró Tom Brady a ESPN.
