Los New York Giants quieren que su estrella Odell Beckham Jr. tenga cuidado con sus extravagancias dentro y fuera del terreno, que sea más responsable.
El receptor fue el centro de la atención la semana pasada al irse a Miami para pasar un día libre con los demás jugadores del equipo, y con el partido de comodines en Green Bay a la vista.
El domingo, Beckham dejó caer una cifra inédita de tres pases en la derrota 38-13 que los Giants sufrieron ante los Packers. Se asegura que el jugador dejó un orificio tras pegarle al muro situado afuera del vestuario visitante en el Estadio Lambeau Field.
Ben McAdoo, entrenador de los neoyorquinos, dijo que se enteró el lunes sobre lo del orificio, pero no señaló quién lo causó, añadiendo que asume la responsabilidad.
En tanto, el gerente general Jerry Reese dijo que se investiga si fue un acto de vandalismo y que se asignará la responsabilidad de los daños al individuo involucrado.
"Me parece que es alguien que debe ponerse a meditar un poco sobre las cosas que hace", dijo Reese. "Todos saben que es un jugador talentoso, pero hay cosas que ha hecho en las que necesita mirarse en el espejo y ser honesto consigo mismo. Creo que lo hará. Le brindaremos ayuda con eso, pero tiene que ayudarse".
Beckham recibió varias multas esta temporada, incluyendo más de 72.000 dólares en los primeros cuatro de cuatro partidos de 2016. La mayor suma fue de 36.000 dólares por un golpe illegal contra el safety de los Saints, Kenny Vaccaro.