Luego de un año donde la pandemia de Covid-19 frenó su preparación y participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020, la comitiva de marchistas mexicanos ya está afinando los últimos detalles para presentarse en la competencia de 50 y 20 kilómetros en el mes de agosto, y que se llevará a cabo en Sapporo, ciudad al norte de Japón.
Parte de los seleccionados en esta disciplina son miembros del Ejército Mexicano, quienes ya han tenido oportunidad de participar en algunos Juegos Olímpicos cómo es el caso del Subteniente Horacio Nava, y el Soldado Isaac Palma Olivares, quienes competirán en la prueba de 50 kilómetros, en pistas de suelo plano pero a temperaturas que probablemente rondarán los 30 grados centígrados.
Por otro lado, debutarán en sus primeros Juegos Olímpicos el Cabo Andrés Olivas y el Soldado Noel Alí Chama, en la categoría de 20 kilómetros. Quienes desde el año pasado han estado aislados de sus familias, para no contraer el virus del SARS-CoV-2 y continuar con hasta cuatro a cinco horas de entrenamiento diarios.
Cabe destacar que en estos Juegos de Tokio, desaparecerán las marchas de 50 y 20 kilómetros, debido a una petición de la Federación Internacional de Atletismo (IAAF), y la cual estableció que en las próximas competiciones a nivel mundial las pruebas serán de 30 y 10 kilómetros.
Y que a partir del 1 de enero de este año, se debe portar un sensor en los tenis de los participantes para detectar pérdidas de contacto en el suelo, algo que no puede ocurrir en esta disciplina, pues se consideraría que el competidor se encuentra corriendo.
Por otro lado, la marcha olímpica es uno de los deportes donde el Ejército Mexicano ha aportado grandes elementos, pues en México 68, la primera medalla para el país en esta disciplina fue del Sargento José Pedraza, quien obtuvo una presea de plata.
Asimismo, de las 69 medallas que el país ha obtenido en Juegos Olímpicos, 10 han sido en este deporte.
OBJETIVOS CLAROS: ISAAC PALMA
Isaac Palma, aunque dijo que disfrutará estos Juegos Olímpicos sin presionarse por una presea, tiene como objetivo superar su tiempo en sus últimos 50 kilómetros, el cual ronda 3:50 horas, y mejorar a 3:41.
El michoacano de 30 años de edad, participó en Londres 2012, dejando una ausencia en Río 2016, ante esto, regresar al escrutinio deportivo a nivel mundial lo motiva mucho, pues como deportista es uno de los mayores logros en su carrera.
“Cuando participé en mis primeros Juegos Olímpicos era un novato. Recuerdo que entre todos los participantes yo era de los más jóvenes, hoy regreso con mucha más experiencia y ganas de hacer un buen desempeño, a pesar de que será diferente a causa de la pandemia”, comentó Palma.
Para Palma, este año fue difícil, ya que su preparación se vio mermada debido al cierre durante meses de áreas deportivas. Por lo que decidió comprar bandas y aparatos de entrenamiento para usar en casa, mientras convivía con sus padres, quienes son población vulnerable ante el Covid-19.
Por lo que reconoció que esta situación no fue propicia para tener un buen entrenamiento. Aunque en los últimos meses ha logrado reponerse, y hoy, marcha por las calles de la Ciudad de México alrededor de cinco horas al día, más una hora de ejercicios generales.
“Mi terreno actualmente son las calles de la Ciudad, con ayuda de mi hermano que es mi entrenador, y más miembros de mi equipo, nos estamos preparando para tener un buen desempeño en Tokio”, aseguró Isaac.
DEBUTANDO: NOEL CHAMA
Noel Chama, de 23 años, come ansias por pisar la ciudad asiática de Sapporo, pues son sus primeros Juegos Olímpicos. Este joven inició su vida deportiva a los nueve años de edad, gracias a su hermana mayor, quien también inició practicando marcha olímpica.
Sin embargo, el éxito a nivel mundial lo conoció en el 2014, con una medalla de bronce en los Juegos de la Juventud llevados en Beijing, China, justo cuando él tenía 16 años. Por lo que su preparación no ha parado, mucho menos en los últimos 15 meses donde en el mundo y en México se ha vivido de manera grave y desalentadora la pandemia de Covid-19.
Para Chama, el cambio de fecha de Tokio 2020, fue un golpe fuerte emocionalmente, ya que llevaba meses preparándose para ello. No obstante, el tiempo de aislamiento, le ayudó a apreciar que, quizá la vida le otorgó una segunda oportunidad para seguir entrenando y dejar en alto a su país, al ejército y a su familia.
“Yo no vi como un año perdido, sino como un año más de preparación. Pero fue complicado, porque llegó la pandemia cuando nosotros estábamos a días de ir a Europa a buscar nuestros pases a los Juegos Olímpicos”, explicó el debutante.
No obstante, también fue un año de estar lejos de su familia, justo para concentrarse en los Juegos y sobre todo para no contraer el virus, y éste pudiera deteriorar su estado de salud y físico, imposibilitándolo de tener su debut.
Pero no fue fácil, ya que justo en los meses de preparación, su madre contrajo Covid-19, afortunadamente sin complicaciones. Lo que ocasionó preocupaciones en Noel; sin embargo, su entrenamiento a las faldas del Iztaccíhuatl continuó.
Hoy el récord para este joven es hacer los 20 kilómetros en tiempos menores al 1h:23 minutos, el cual es el récord mundial hasta ahora. Y su máximo reto es vencer a los japoneses, quienes figuran como grandes rivales.