Tras las críticas de las atletas Allyson Felix y Alysia Montaño, a las políticas de maternidad de Nike, la empresa deportiva estadounidense expandió su política de protección para sus atletas patrocinados.
La seis veces campeona olímpica, padeció con su sponsor. En la renovación de su contrato vencido a fines de 2017 le ofrecieron un acuerdo 70 por ciento más bajo y cuando pidió garantías por malos resultados durante los primeros meses de su maternidad, se las negaron, contó Allyson en una columna en The New York Times.
Minetras que Montaño denunció la falta de apoyo por parte de su patrocinador cuando les comunicó su intención de ser madre.
"Cuando les comuniqué mi intención, su respuesta fue que haríamos una pausa en mi contrato y que dejarían de pagarme", declaró en 'The New York Times'.
A finales de julio, Felix puso fin a las negociaciones con Nike para un nuevo contrato y firmó con Athleta, una marca de ropa deportiva que nunca había patrocinado a atletas. Sus voz fue escuchada pues el vienes pasado el vicepresidente de márketing global de la marca le mandó una carta para anunciarle una nueva política contractual no discriminatoria.
“Si la atleta queda embarazada, Nike no puede aplicar ninguna reducción relacionada con el rendimiento (si se diera el caso) por un período consecutivo de año y medio, comenzando ocho meses antes de la fecha del parto. Durante dicho período, Nike no puede rescindir ningún contrato si el atleta no compite debido al embarazo”, se lee en el correo firmado por John Slusher.