Así como ponemos pretextos para prolongar el inicio de un entrenamiento o para no hacer ejercicio, proponemos algunas razones para que cambies tu chip mental y comiences a correr, o si ya lo haces, te decidas a iniciar ese entrenamiento que has ido postergando, y en unos meses hagas por fin ese maratón que siempre has prometido.
POR QUÉ DEBES CORRER
Muchas personas empiezan a correr con la simple misión de hacer ejercicio o quizás para bajar de peso. Correr es un ejercicio accesible para todos y que no requiere de gran inversión, salvo unos tenis adecuados para correr, es una buena forma de mover el cuerpo, ganar fuerza cardiovascular y, sumado a una buena alimentación, es de gran ayuda para llegar a nuestro peso ideal. En mi experiencia como maratonista, he descubierto que correr tiene muchos más beneficios que sólo mantenerte activo o quemar calorías y quiero compartir contigo 15 de las muchas razones por las que creo que DEBES de empezar a correr, seguir corriendo o si es tu caso, animarte a correr un maratón.
1. Redescubrirte a ti mismo
Pocas cosas se equiparan a correr en cuanto a la oportunidad que te da de para descubrir tu verdadero potencial. Cruzar una meta, ya sea de una carrera de 10 kilómetros un maratón completo, te permite ver claramente de qué estás hecho y cómo, si te lo propones, puedes lograr cosas impresionantes.
Muchísima gente no se cree capaz de hacer ciertas cosas y se sorprende al descubrir que después de unas cuentas semanas de entrenamiento ya es capas de correr cinco o diez kilómetros. La capacidad de los seres humanos es casi infinita siempre y cuando tenga la determinación para hacer las cosas, los límites los pone la mente no el físico. Correr te ayudará a descubrir que eres capaz de hacer lo que quieras y de lograr todas tus metas, y esa lección será aplicable a todos los aspectos de tu vida.
2. Vivir más y más feliz
Las estadísticas lo demuestran, los corredores viven más tiempo, más intensamente y más sanos que los adictos a la televisión, las redes sociales, los videojuegos o las salidas nocturnas. No digo que no tengamos otro tipo de esparcimiento o que dejes las actividades aquí mencionadas, lo que sostengo es que la vida está en el mundo exterior, y que correr es una de las formas más efectivas de conservar la salud. Se dice que hoy en día el reto no es llegar a viejo, si no llegar bien tanto física como mentalmente; en ese orden de ideas el deporte es equiparable a un seguro de vida que está en ti comprarlo a tiempo para alcanzar más metas.
3. Disfrutar de cenas épicas
Sin culpa alguna, disfrutarás la famosa cena precarrera. ¡Gracias carbohidratos! Uno de los más grandes placeres que ofrece la vida es, sin duda, comer. Es cierto que todo exceso es malo, pero es muy diferente darte un lujo cada determinado tiempo cuando eres deportista, que cuando no lo eres. Piénsalo, si comer es una de las cosas que más te gusta hacer, correr es lo que necesitas para poder disfrutarlo aún más y liberarte del prejuicio de unos kilos guardados en tu cuerpo.
4. Conocer profundamente nuevos lugares
Correr en otra ciudad te permite conocerla desde otro punto de vista, te permite recorrer rincones que probablemente no visitarías en modalidad turista. Cuando empieces a correr te darás cuenta que esto es cierto. Empieza por tu ciudad y verás que estarás maravillado con los rincones que vayas descubriendo y que no tenías ni idea de que existían. Sal al campo, a la montaña o a los lugares cercanos a tu casa y encuentra sitios espectaculares. Ya te lo había dicho, la vida está allá afuera y correr te da la oportunidad de vivirla más intensamente.
5. Ganar resistencia en tu vida
Correr te da resistencia mental y física, te ayuda a dormir mejor y por lo tanto a despertar con energía, a pensar claramente y tener más ideas para resolver problemas. A resistir cualquier inclemencia y salir triunfante.
Cuando te das cuenta que puedes llevar a tu cuerpo a lo máximo y superar todas las barreras autoimpuestas, no hay obstáculo que te pueda detener. Dos de las mejores lecciones que puedes recoger de una carrera de fondo es que todo es posible, y que la recompensa siempre es directamente proporcional al esfuerzo.
6. Dar un buen ejemplo a tu familia
Estar sano y feliz no sólo es un regalo para ti, sino para tu familia también. El deporte y la alegría se contagian con el ejemplo. Tener hijos no debe de ser un pretexto para no hacer ejercicio, al contrario, debe ser tu razón para hacerlo. Al correr nuestro cuerpo libera endorfinas, una sustancia que está asociada a las sensaciones placenteras, por lo tanto, al hacer deporte se generan cada vez más haciéndonos sentir mucho más felices, realizados y plenos. ¿Recuerdas la frase "mente sana en cuerpo sano"? Todo esto está directamente relacionado con ella. Al hacer ejercicio de manera constante, nos sentimos mejor, tenemos pensamientos sanos y vemos la vida desde una perspectiva mucho mejor.
7. Dominar el arte de vivir
Algunos corredores dicen que hacer una carrera larga, como un medio maratón o un maratón, se parece mucho a la vida. Tiene subidas y bajadas, momentos felices y momentos complicados, que con fuerza y resistencia se conquistan. Correr una distancia larga te ayuda a aprender de ti y de la vida; sin embargo, no pienses que se trata de llegar a una sola meta y ya, por el contrario, en el instante en que estés cruzando la primera piensa en cuál será la siguiente.
8. Rejuvenecer tu alma
La energía colectiva de una carrera difícilmente se puede encontrar en cualquier otro evento deportivo. Este punto solo lo entienden aquellos que ya han participado en una carrera y saben lo que es que miles de personas, entre las que corren y los espectadores, te estén animando constantemente. La energía y buena vibra que se respira en las carreras no tiene comparación y es de alta duración.
9. Aprender a ser responsable
Cuando corres el único responsable de empezar a hacerlo, de seguir en un trayecto y de terminar una carrera eres tú. Nadie puede hacerlo por ti. Corriendo aprendes que cuando pones en tus manos lo que tú puedes solucionar, todo es más fácil. Aprendes que algunas cosas, por difíciles que parezcan, dependen sólo de ti.
10. Agregar una estrellita a tu currículum
Incluir en tu curriculum que eres corredor te da buenas credenciales ante un posible empleador. Los corredores, en especial los maratonistas, reflejan su disciplina, capacidad de planear y pasión para lograr metas. Está demostrado que hoy en día a las empresas les interesan las personas sanas y deportistas, porque esto lo relacionan con determinación y compromiso.
11. Salirte de la estadística
Es creciente la obesidad en el país, pero fuera de la estadística, lo importante es tu salud, ¿sabes todos los riesgos de salud que trae consigo el sobrepeso y la obesidad? Correr te puede ayudar a llegar a un peso saludable; más allá de la parte estética, la obesidad desencadena cientos de enfermedades, algunas de ellas graves, como el cáncer, la diabetes, padecimientos coronarios crónicos, cirrosis, problemas gastro intestinales agudos, mal funcionamiento renal, entre muchas otras. El ejercicio y una dieta balanceada ayudan a prevenir el sobrepeso y a evitar mucho sufrimiento.
12. Conocer gente feliz
Los clubes de corredores te pueden acercar a gente apasionada, comprometida con su salud, capaz de lograr metas, feliz y de pasadita, muy en forma. ¿A poco no suena bien? Correr es uno de los deportes más democráticos y liberales que existen, pues es la amalgama que une a las personas sin importar su condición económica, su raza, predilección política o religión. Lo mejor de todo es que en la mayoría de los clubes los miembros se dedican a motivar a sus compañeros para que consigan sus metas y se demuestren a sí mismos que son capaces de hacer todo lo que se propongan.
13. Incrementar tu autoestima
Correr es una cadena de pequeños actos de amor a ti mismo. Poner el despertador, levantarte más temprano, salir a correr, poner atención a tus comidas, hidratarte bien, fijarte metas, cumplirlas. Todo lo que tienes que hacer para prepararte para una carrera es un recordatorio constante de amarte y cuidarte a ti mismo.
14. Aprender a vencer cualquier obstáculo
Correr estimula el pensamiento creativo, si tienes un problema, corriendo encontrarás más soluciones, pues las mejores ideas llenan el momento más inesperado o cuando ni siquiera estás pensando en ellas. Correr es una excelente manera de lograr mantener la mente en blanco, de vivir en el presente y estimular así, la producción de buenos pensamientos.
15. Y, ¿por qué no?
Esa es la última razón por la que debes correr. Porque puedes. ¡Anda, ponte los tenis! ¡A correr!