Fue en el año 2001 cuando Acapulco acogió por primera vez el Abierto Mexicano de Tenis, por lo que será 20 años después que se mude el torneo al nuevo estadio, que quedará listo para entonces.
“Hay una combinación de nostalgia porque aquí sufrimos la primera gran anécdota del torneo fue el viernes de 2001 que nos cayó un diluvio, la cancha se inundó y creo que fue el primer gran reto de Mextenis como equipo, secar la cancha que era de arcilla, sacar el torneo adelante, pero también motivados por el tema de estrenar casa.
"Ahora, los jugadores y el público no cambiarán, pero deben adaptarse pues es mucho más cómodo, creo que el cambio será muy positivo”, compartió Raúl Zurutuza.
Esta última edición marca el cambio generacional por el que atraviesa el tenis mundial, con el surgimiento de figuras como Alexander Zverev, Félix Auger-Aliassime y Alex De Miñaur como algunos de los exponentes de esta fresca camada que estarán en Acapulco.
“Siempre es muy gratificante, sobre todo que los chavos de esta nueva generación como Zverev, Aliassime, que pongan la meta de venir es importante, creo que el público mexicano tiene que empezar a ver a estos jugadores.
"Tarde o temprano no va a haber ningún Rafa, ni Djokovic, ni Wawrinka y creo que lo que viene atrás de ellos es muy bueno, tienen buen tenis, les tocó la mala fortuna de llegar después de estos grandes tenistas, pero creo que entre más los tengamos en Acapulco, nos irá mejor y ayudará mucho”, finalizó.