Tras sies años de los Juegos Olímpicos en Londres 2012, la exhalterista mexicana, Luz Acosta recibió la presea de bronce, resultado de una serie de descalificaciones de sus rivales por arrojar positivo en doping.
La ceremonia se llevó a cabo en el Comité Olímpico Mexicano y fue el presidente del organismo, Carlos Padilla Becerra, quien hizo entrega de la medalla en la categoría de 63 kilos a la exatleta.
Por tal motivo, el nombre de Luz Acosta se ganó un lugar en el Muro de Medallistas Olímpicos de México.
“Si hubo justicia para mí puede haber para muchos más. En México necesitamos la posibilidad de creer y que al final del camino se tiene una recompensa. Debe haber algo mágico para que llegue a suceder”, comentó la exatleta durante la ceremonia de premiación en la Plaza Olímpica.