El ABB FIA Formula E World Championship regresa a la Gran Manzana este sábado y domingo con el New York City E-Prix en las calles del barrio Red Hook de Brooklyn.
Esta es la quinta vez que el ABB FIA Formula E World Championship corre en la ciudad de Nueva York, una de las favoritas de los pilotos, los equipos y los aficionados.
El circuito de 2,320 km y 14 curvas se mantiene sin cambios respecto a su trazado habitual, con el icónico paisaje urbano del Bajo Manhattan y la Estatua de la Libertad como telón de fondo.
El circuito serpentea alrededor del Brooklyn Cruise Terminal, en el corazón del barrio de Red Hook, en Brooklyn. Revestido de hormigón implacable, es una verdadera prueba para los pilotos y los ingenieros por igual.
Los pilotos tuvieron que negociar una zona de activación del ATTACK MODE revisada el año pasado y volverán a enfrentarse a lo mismo con el bucle que se mueve desde la salida de la curva 5 hasta el exterior de la curva 10.
El piloto británico Sam Bird (Jaguar TCS Racing) es el corredor más exitoso en el Brooklyn Street Circuit, con tres victorias en su haber, incluyendo un espectacular doblete en la primera visita de la Formula E a la ciudad.
La ciudad de Nueva York se ha fijado un objetivo de emisiones netas de carbono cero para 2050, con una reducción del 85% de las emisiones de gases de efecto invernadero para la misma fecha con respecto a los niveles de 1990 consagrados en la ley.
Para conseguirlo, Nueva York está invirtiendo 3,900 millones de dólares en 67 proyectos de energías renovables a gran escala en todo el estado, que crearán más de 150,000 puestos de trabajo.
El objetivo es que la energía del estado dependa en un 70% de fuentes renovables para 2030, con 1,800 megavatios de energía eólica para 2024 y un crecimiento del 1.700% en energía solar desde 2012. El programa "EV Make Ready" prevé 850,000 vehículos de cero emisiones y 50,000 estaciones de carga en el estado para 2025.
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