Hace un año, el Abierto de Zapopan parecía haberse sacado la lotería cuando Indian Wells anunció su cancelación debido al brote de coronavirus en California. La WTA ofreció llevar un cuantioso grupo de las mejores jugadoras al torneo de Jalisco, la organización del torneo accedió, pero finalmente, dos días después la asociación determinó suspender definitivamente todas las competencias convirtiendo al certamen tapatío en el primero del país.
Pero al ver la iniciativa mostrada por la organización del Abierto de Zapopan, WTA dio el visto bueno a la adquisición del evento jalisciense de los derechos del torneo categoría 250 que dejó ir Mextenis en Acapulco y convertirlo en el primer certamen tenístico con público de México en la pandemia Covid-19.
“Jalisco está prácticamente listo, con mucho entusiasmo, sabemos la magnitud de este torneo, este torneo será bastante benéfico para abrir las puertas de Jalisco”, dijo en videoconferencia Gustavo Santoscoy, director del Abierto de Zapopan.
“Estamos contentos porque si bien serán 800 personas al día viendo tenis, es importante para un evento de tal magnitud el tener público, lo hablamos con comisionados de WTA, la experiencia con y sin gente cambia para jugadoras”.
Es así que el torneo estrenará su etiqueta de 250 de la WTA con público restringido en sus tribunas, además de que otorgará el mismo número de puntos a la campeona, además de una bolsa de 235 mil dólares. Siendo la principal favorita de la afición, la tenista local Renata Zarazúa, quien estará acompañada de tenistas como Marie Bouzkova, Nadia Podoroska y Eugenie Bouchard; en espera de que Sloane Stephens confirme su participación.
“Ya llegó Olmos, una mexicana de buen a actuación en Australia, quiere refrendar el título aquí y ya está Renata Zarazúa. También estamos esperando a Marcela Zacarías; mañana llega Podorska y Buskova igual”, compartió.
“Ellas llegan de su procedencia de origen, se suben a un auto, no le pueden ni abrir la puerta ni cargar sus maletas, un protocolo con el conductor, llega directo al hotel a prueba de PCR, con el test pasa a su habitación y hasta que no salga negativo pueden bajar; hay algunas que sigan en su habitación esperando poder dejar su habitación en espera del resultado, igualmente todo el staff que está participando estamos en pruebas y controlados, la WTA lo tiene bien estudiado desde el US Open”, dijo sobre los protocolos de su arribo.
El evento en esta ocasión no contará con ceremonia de inauguración, desfiles o eventos sociales, para evitar la propagación del virus. Un evento totalmente tenístico sin arriesgar a la gente dando predilección al distanciamiento social, por lo que no habrá restaurantes, ni mesas por lo que la comida debe ser consumida en su lugar únicamente. Se comprará solo con tarjeta, pues el uso de dinero en efectivo está prohibido.