La holandesa Sifan Hassan culminó el triple reto que se impuso en los Juegos de Tokio con la medalla de Oro en 10 mil metros tras doblegar en la última vuelta, con un tiempo de 29:55.32, a la etíope Letesenbet Gidey, que pagó su generosidad cediendo la Plata a la bahrainí Kalkidan Gezahegne.
Etiopía, que había ganado cinco de los títulos de 10 mil disputados en la historia olímpica (la prueba femenina entró en Seúl'88), sólo tuvo esta vez el consuelo del Bronce.
Dos Oros y un Bronce. La carrera de 10 mil era la tercera cita con la historia para Sifan Hassan en Tokio. La holandesa había ganado el 5 mil pero en mil 500 había sido relegada al tercer puesto por la keniana Faith Kypiegon y la británica Laura Muir. Veinticuatro horas después regresaba a la pista para la Final directa de 10 mil, su sexta y última carrera en nueve días.
Las piernas de Hassan, doble campeona mundial de 10 mil, acumulaban ya una carga descomunal en la penúltima jornada de los juegos. El primer mil en 3:03, al ritmo que marcó la japonesa Ririka Hironaka, puso al grupo en fila.
El 8 de junio pasado, Letesenbet Gidey, subcampeona del mundo, le arrebató por cinco segundos, con un crono de 29:01.03, el récord mundial que la neerlandesa había logrado sólo dos días antes en la misma pista de Hengelo (Países Bajos). La etíope, con más frescura en las piernas, partía, por tanto, como favorita.
Así lo entendió también Gidey, que se sirvió de la intrépida nipona como liebre hasta el 3 mil, pero a partir de ese punto quedó ella al frente, escoltada por las kenianas Obiri e Irene Cheptai, con Hassan en el centro.
A mitad de carrera, el ritmo impuesto por Gidey (15:08.23) había formado una avanzadilla de cinco, junto a las kenianas Helen Obiri e Irene Cheptai, Hassan y Gezahegne, aunque las dos primeras se quedaron en el séptimo km.
Nadie le dio un relevo a la etíope y cuando faltaban siete vueltas empezó a sentir el resuello de Hassan a su espalda. Gidey, que recorría la pista en 70 segundos, Hassan y Gezahegne se aseguraron las medallas con tres kilómetros por delante.
La holandesa exprimió el trabajo de Gidey, aguantó el cambio de la etíope al toque de campana y esperó a la última curva para rematarla con facilidad. Venció con un tiempo de 29:55.32, y por detrás Gezahegne (29:56.18) también rebasó a la agotada etíope, tercera con 30:01.72.
Las dos más rápidas de la historia sólo se habían enfrentado una vez en esta distancia. Fue en los Mundiales de Doha 2019 y la holandesa, como ahora, resultó ganadora, campeona con 30:17.33 frente a los 30:21.23 de Gidey.