La fecha límite de traspasos en la NFL llegó y mientras unos equipos consiguieron a su pieza faltante para trascender en la temporada, otros pensaron más a futuro y un puñado aparte hizo autenticas compras de pánico.
Chicago y Pittsburgh fueron esos dos equipos a los que el tiempo se les acabó y tomaron lo primero que les vino a la mente. Chase Claypool dejó la mediocridad en la que se encontraba con los Steelers para unirse a un equipo de los Bears con tres victorias en lo que va del año. Por su parte, los Steelers decidieron reforzar sus perímetro con William Jackson III, quien apuntaba a ser despedido por los Commanders tras un pésimo inicio de temporada.
Miami y Minnesota, por su parte, fueron los equipos que sí hicieron una adquisición digna de contendientes al Super Bowl. Los Dolphins se hicieron de los servicios de Bradley Chubb, cazador de cabezas de 26 años con 5.5 capturas de quarterback en 2022. Mientras que los Vikings con marca de 6-1 decidieron mejorar su cuerpo de receptores con un rival divisional. T.J. Hockenson es el nuevo ala cerrada del conjunto púrpura.
El conjunto de Kevin O’Connell apenas suma 37 recepciones entre su grupo de ala cerradas para 270 yardas y tres touchdowns en 2022. Hockenson, por su parte, tiene un presumible registro de 26 atrapadas para 395 yardas y el mismo número de anotaciones. El joven de 25 años prácticamente tiene la misma producción que todo el grupo de alas cerradas en Minnesota.
Roquan Smith se mudará de Chicago a Baltimore, Nyheim Himes hará lo propio con destino a Buffalo a cambio de Zack Moss y una selección condicional de quinta ronda que se marchan a Indianapolis. Jeff Wilson Jr se cambiará de la costa oeste al este con los Dolphins de Tua Tagovailoa, en el resto de movimientos relevantes en el ‘deadline’.
Asimismo, y a pesar de enfrentar una suspensión de un año, Calvin Ridley encontró acomodo en la fecha límite de transferencias en la NFL. El receptor egresado de Alabama debutará en 2023 con los Jaguars de Trevor Lawrence.
Ridley de 26 años está suspendido por apostar en juegos de la NFL durante su ausencia de los emparrillados, con el fin de priorizar su salud mental. Antes de cortar su participación en la temporada 2021 tras solo cinco juegos, el velocista venía de superar las mil yardas en 2020 (1,374) y desde su campaña de novato en 2018 ha superado las 800 yardas, con excepción del año pasado.
Este 2022 los Jaguars tienen a Christian Kirk como su hombre insignia en el juego por aire con 498 yardas por recepción y cuatro anotaciones. Pese a liderar en este rubro, su producción no es precisamente la mejor debido a que solo promedia 62.3 yardas. Jacksonville no tiene un receptor de más de mil yardas en la temporada desde que D.J. Chark lo consiguió en 2019 con Nick Foles y Gardner Minshew como quarterbacks.