Los New Orleans Saints jugarán el partido inaugural de su temporada en Jacksonville debido al huracán Ida.
En vez de enfrentarse a los Packers en el Superdome de su ciudad el 12 de septiembre como estaba pautado, lo harán en el feudo de los Jaguars, anunció el miércoles la NFL.
Aunque el Superdome no parece haber sufrido tantos daños por el huracán, existen problemas logísticos para albergar un partido de NFL en Nueva Orleans debido a la devastación en el área circundante.
“Estoy muy orgulloso de la gran cantidad de comunicaciones que tuvimos con las agencias pertinentes en el pequeño lapso de tiempo que tuvimos para poder tomar esta decisión”, declaró la propietaria de los Saints, Gayle Benson.
“Nunca es fácil tomar la decisión de que los Saints no jueguen en su casa en el Caesars Superdome, pero estoy seguro de que esta es la decisión correcta para nuestra ciudad en este momento”, añadió.
El gerente general Mickey Loomis aclaró que a pesar de las circunstancias, los Saints esperan poder jugar muchos partidos en el Superdome esta temporada.
Después del partido inaugural, los Saints tienen programados partidos en Carolina y en Nueva Inglaterra antes de volver a ser anfitriones, el 3 octubre contra los New York Giants. Tendrán otros dos partidos como visitantes, luego una semana libre y luego se enfrentan al campeón reinante Tampa Bay el 31 de octubre.
Antes de la llegada del huracán, los Saints evacuaron Nueva Orleans y se fueron a Dallas, donde han practicado en el AT&T Stadium, hogar de los Cowboys. Practicarán en Texas toda la próxima semana, y viajarán a Jacksonville un día antes del partido.
“Tenemos un plan sólido para la próxima semana de preparativos. ... Tenemos donde practicar y donde quedarnos”, expresó Loomis.
“No creo que sea tan excepcional jugar en estadio ajeno la primera semana, porque tendremos que hacer lo mismo la segunda semana y la tercera semana. Así que será un viaje normal, simplemente que no jugaremos aquí”, añadió.
El huracán Ida llegó justo en el 16to aniversario del huracán Katrina que también azotó Nueva Orleans. Ese año, los Saints se trasladaron a San Antonio donde jugaron como anfitriones, y en Baton Rouge en la Universidad Estatal de Luisiana. También fueron “anfitriones” en un partido realizado en el Giants Stadium de Nueva Jersey.