El 2020 fue uno de los años más complicados en la historia moderna. La vida como la conocemos cambió de manera radical y la humanidad en general se enfrentó a un sin fin de obstáculos. Cuando el mundo entero necesitaba motivación, Alex Smith salió a dar la cara y con su historia de recuperación le devolvió al planeta entero la esperanza.
La estampa de Smith abandonando el FedEx Field con la pierna derecha hecha añicos le dio la vuelta al mundo gracias a la inmediatez de las redes sociales. Aquel 18 de noviembre del 2018 el veterano quarterback vivió, sin duda alguna, el peor día en su vida y lo traumatizante que fue su recuperación es la prueba fehaciente de ello.
Una fractura de tibia y peroné, irónicamente lo unieron más a su familia. Smith fue cuidado en todo momento por Elizabeth, su esposa, y por sus dos hijos. El quarterback del Washington Football Team no se quedó solo y el apoyo incondicional de su núcleo le hicieron ver al mundo entero que el amor incondicional sigue presente.
“Nuestra prioridad es salvarle la vida y haremos lo posible por salvarle la pierna. Cualquier cosa más allá de eso es un milagro”, dijo Elizabeth Smith días durante el proceso de recuperación del mariscal de campo. Y no, no eran exageradas las suposiciones de la señora Smith. La vida del que alguna vez fue la primera selección global en el draft de la NFL estuvo realmente en peligro, perder la pierna entraba dentro del presupuesto.
Fueron un total de 17 cirugías las que el quarterback necesitó para salvar su vida, su pierna y su carrera en la NFL a la que se aferró así como la humanidad lo ha hecho para salir adelante del coronavirus. El 11 de octubre del año pasado, Smith logró lo inimaginable: volver a un campo de futbol americano. Luego de 693 días que fueron toda una vida para el pasador, cumplió su meta de regresar y lo hizo en plan grande.
Tras cumplir su objetivo, Smith decidió retirarse de la NFL para aprovechar el gran obsequio que la lesión le dejó: una relación más que reforzada con su familia. Con 36 años de edad y nada más que demostrar, Smith eligió el descanso tras haberle mostrado al mundo que nada es imposible en la vida.
