Lamar Jackson lanzó para 316 yardas, incluido un pase de anotación de 49 yardas a Marquis Brown, quien se tiró un clavado para atrapar el balón, y los Ravens de Baltimore tumbaron a los Broncos de Denver de la columna de equipos invictos al imponerse 23-7 el domingo.
Los Ravens (3-1) ganaron su tercer partido consecutivo después de una derrota en tiempo extra en la primera semana contra Las Vegas. Estuvieron cerca de quedarse cortos de empatar el récord de los Steelers de juegos consecutivos con al menos 100 yardas terrestres, cuando Anthony Averett interceptó un pase de Drew Lock en la zona de anotación con 3 segundos por jugar.
En lugar de poner la rodilla en tierra, Lamar Jackson salió en formación escopeta y llevó el balón de forma personal en acarreo de 5 yardas, con las que los Ravens llegaron a 102 en el juego, y así ligar 43 partidos en fila con más de 100 yardas, que empata una marca establecida por Pittsburgh entre 1974 y 1977.
Los Broncos (3-1), cuyas victorias fueron frente a equipos que de forma combinada tenían marca de 0-9, acabaron con Drew Lock en los controles de la ofensiva después de que Teddy Bridgewater saliera con una conmoción cerebral. Lock terminó con 12 pases completos de 21 intentos para 113 yardas con tres capturas y una intercepción.
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